Volver a mirar lo clásico, sentir que nos sigue perteneciendo como todo lo que amamos, nos conmueve y no pueden quitarnos. Permitir que los sonidos nos inunden como música total, que invadan todas nuestras fibras, que lo logren en todos los tiempos, en todos los lugares y en todos los grupos humanos. Comprender y sentir esto es entender porqué es valiosa, porqué es música, porqué es clásica.
Es sobre esta esencia clásica y musical que un piano y un violín se animan, vuelan, se deslizan.
El arte, y de ahí lo artesanal de estos músicos , la alegría en la improvisación sobre estos sonidos que crean y re-crean sobre lo siempre nuevo, sobre lo siempre clásico, es lo que nos va a permitir encontrar nuevas miradas sobre una música que se expande y se proyecta hacia todos los sentires pero sin dejar sus orígenes sus bases.
João Silva en el violín y Mariano Camarasa en piano son los encargados de estas improvisaciones musicales ejecutadas movimiento a movimiento, nota a nota pero ensambladas sobre una música clásica que nunca desaparece pero logra crecer, transformarse y ser apropiada por la totalidad de los que la escuchan.
Aman lo que hacen. La música vuela con ellos porque decidieron hacer lo que aman.